jueves, 30 de octubre de 2008

i missed

Mirar al cielo debajo de la copa de los árboles, y ver los haces de luz que se cuelan verdosos en el interior, cuando tal vez una que otra hoja caiga sobre tu cara, es algo que ya hace tiempo no hago.

También dejé de sentarme a beber té en mi balcón. Ahora se llenó de polvo.

Ya olvidé como andar en bicicleta. Y tampoco paseo por el parque. Ya no salgo a caminar con música en mis oídos, caminar por caminar, hasta donde me lleven los pies, y cuando me canse sacar un cigarrito y fumarlo en alguna sombra.

Ya olvidé lo que se sentía meterme al agua tibia del mar. No nado hace un año.

Ya ni dibujo monos raros ni canto en la ducha. Me he quedado inerte, leyendo leyendo leyendo pegada a mis libracos, las manos se me han puesto como el papel, en mis ojos sólo se ven letras letras letras por todas partes.

Y como que extraño volver a vivir tranquila. En la paz de los pequeños detalles... extraño que me llamen a "tomar once" y que mi papá me chifle porque ando jugando y tengo que bañarme e irme a dormir. Extraño leer los Mampatos, extraño pasear a mis perros, extraño "hacer tareas" para después tomar leche, ver la teleserie y "meterme al sobre".

Extraño la vida simple, el abrazo que solucionaba todo. Extraño que me traten bien, que me hagan sentir querida, extraño tener un hogar, por aparente que fuese, al cual volver corriendo y con ganas.

Extraño no preocuparme por la plata, extraño el beso de buenas noches. Extraño el "santíguame papá", extraño quedarme dormida tomada de la mano de mi hermana que dormía en la cama de al lado, y jugar a las lanchas con las almohadas. Extraño despertarme y ver Thundercats y Baywatch, Salvado por la campana y Robotec. Extraño el Nesquick y el pan con manjar...

Extraño a la antigua yo.

domingo, 26 de octubre de 2008

black spot

No le presté atención al horóscopo de ayer.
Me prevenía de una pelea... y no lo escuché... los horóscopos nunca son del todo confiables.

Ultimamente nada es confiable. Al parecer ni siquiera yo.

¿No será mucho?
Puedo soportar el insulto mental, la murmuración por lo bajo, el pelambre, los silencios... pero que me lo grites en mi rostro, tirando a la basura todo lo que me cuesta ser normal... todo lo que trato de agradarte, de ser parte de una familia que siempre me he tenido que armar a lo lego. ¿No es mucho, tener que ser insultada?
Tú no sabes lo que es vivir bajo tu sombra.
Siempre bajando la cabeza... porque todo lo que hago nunca será suficiente.

Y si lo digo, me victimizo. Soy exagerada, soy la loca, la floja de mierda... ¿No será mucho? Dime... ¿no será mucho?

Tal vez piensas que me endurecí, que no siento tus palabras. Cuando deberías saber que las tuyas son las únicas que escucho, las que me consuelan... y las que más me hieren. Al menos no eres tan original como piensas, papá ya ha tomado tu lugar muchas veces...
egoísta! solía gritarme él...

Perdón por no ser mejor... perdón por no poder ser como quieres que sea... perdóname.
Perdóname, soy la mancha negra en tu delantal, un estorbo, un parásito, la lacra... No sirvo para nada, no tengo trabajo, no produzco, no soy exitosa, ni una genio. A veces te hago reír... y nada más.

Un mueble sería mucho más útil. Ocuparía menos espacio, te estresaría menos...

Perdón.

domingo, 19 de octubre de 2008

good morning sunshine

Polyphonic spree - light and day

Se sintió como si me creciesen alas, sentí que si no me sostenía a la tierra por el peso de mi cuerpo saldría volando.
Toda palabra se volvió vacío.
El zumbido de mis orejas creció, era yo un torrente de sangre parado. Bombeando a mil por segundo.

Torpes mis brazos se abrían, y sentía que no apretaba fuerte, sentía que tenía a un espejismo en tu lugar. Sentía que de un soplido saldrías como polvo por la puerta.
Todo lo que toma tiempo construir puede derribarse de un sólo manotazo.
No sabía si no lloraba porque no cabía en mí la tristeza en ese momento, tal vez la emoción derrocó todo pensamiento negativo que albergué mientras arrastraba mis piernas de plomo hacia la casa.

Mi cuerpo se volvió una masa inerte. Me dejé llevar, te escuché, me escuchaste. Y no fue hasta que volví a casa cuando caí en la cuenta de que tal vez sí, tal vez te había visto.

Los sueños no se vuelven realidad.
Los sueños son la realidad. El límite se vuelve confuso, inasible, inexistente. Ya no importa divagar de un lado a otro, por que tal vez te ví y tal vez me viste. Tal vez tu iris quedó impreso en el mío. Tal vez aquella noche dormí y mi alma se escurrió hasta donde estabas tú. Tal vez cuando abra los ojos me daré cuenta que mi vida entera ha sido un espejismo. (Muy "La vida es sueño"?)

Da igual. No hay barrera que no sea infranqueable, no existe el límite que no se doble un par de grados más.
Ojalá la próxima vez que escriba, incluya: ya no hay miedo.

jueves, 16 de octubre de 2008

statement

La teoría de la recepción literaria ya había previsto lo sucedido y lo volveré a explicar yo.
El sujeto que produce un texto sabe que quien lo lee rellena con sus conocimientos los vacíos, pero eso mismo puede generar una interpretación errónea de lo leído. El lector debe ajustarse a las marcas textuales, a su bagaje, y si conoce al escritor, debe saber que su mensaje no pudo haber significado lo que él cree que significó.

En vista y considerando que te sucedió eso, estimado lector. Déjame ilustrarte lo escrito anteriormente.

En un arrebato de mamonería comenzé a escuchar música de los meses dorados. Entiéndase que dentro de estos tracks me encontré con Kerli y su "walking on air" y por supuesto, con Dancing in a minefield, canción de un grupo que Ud. - mi pobre lector - me recomendó: Plushgun. Amé de inmediato la canción, y ayer la escuchaba cual si fuese un vinilo rayado. Una y otra y otra y otra vez... soy así con la música que amo.

La reproducción constante de Dancing in a minefield trajó a mi un recuerdo, algo de una conversación telefónica que tuve con Ud. - despistado lector - en la cual yo algo reproducía sobre mis sentimientos dirigidos a tú ratonil persona.

Basta decir que la mamonería me avergüenza... así que lo coloqué todo narrativamente fictivizado bajo la pseudo apariencia de un sueño que tuve.

Por último, quiero agregar que si Ud. - mi atolondrado lector - vuelve siquiera a pensar que yo lo estoy engañando, iré personalmente - y asumiendo riesgo cualquiera - a su institución educacional para golpearte hasta que entiendas que te amo.
Lo sé, soy adorable.

Atte.
Yo

miércoles, 15 de octubre de 2008

percepción distorsionada

Marqué los números... aquí son siete. En Arica siempre eran seis.

tuuuut... tuuut... tuuuut

"And we will dance and dance and dance the night away"

- ¿Aló?

"We were dancing in a minefield with a bottle of whisky"

- Necesito decirte algo... espera, deja bajarle al volumen.

- ¿Pasó algo?

- No, no... es que necesito decirte algo... yo...

"And through the barricades they'll push their hate"

- ...

- Yo te quiero, mucho... tú... tú me gustai' caleta...

Y ahí desperté.

sábado, 11 de octubre de 2008

we need a plan

Coach, a pesar de que amo tus analogías deportistas por favor no olvides que tú y yo somos un equipo. Si tú no juegas conmigo entonces de qué sirve todo esto...

Se que no soy el bastón más fuerte sobre el cual puedas apoyarte, de hecho, te he fallado en la única promesa que te he hecho... prometí no dejarte sola: y mira como estamos. Podría torturarme por ello, y confesaré que a menudo lo hago, pero no siempre, precisamente porque necesito con toda mi alma saber que aunque exista un 1% en nuestras estadísticas emocionales que indique que estaremos bien, cuidaré ese 1% en contra del 99% que a gritos indica nuestro fracaso.

Pero debemos ser más precavidas, más rápidas, anteponernos esta vez y ver realmente como son las cosas: no más ilusiones, sólo... la verdad. Y la verdad es que en el momento en que mi inicial aparezca en tu medio ambiente familiar volverá a arder Troya. Y la verdad es que volveremos a pasar por toda la miseria, tal vez con mucho menos miedo, pero la rabia volverá a aflorar, y tú Montesco y yo Capuleto o visceversa... y no quiero volverte a perder. No sé si pueda soportarlo dos veces... prefiero que me odies, pero que no tires nuevamente por mi culpa el progreso a la basura.

Como ves, estoy dividida, entre el pasado que alberga todo el amor que te tengo, el presente que día a día lo reafirma cada vez que abro los ojos, y el futuro que amenaza con aplastarlo de un manotazo.

Eres mi fuerza, pero no puedes ser sólo mi fuerza... porque no eres Dios... y te acepto así. Y te amo así. Y quiero seguir amándote, de verdad que sí, pero tengo miedo del contexto, del entorno, de volver a escondernos, de volver a mentir, de volver a amarrarnos la soga al cuello.

Eres todo y mucho más... quisiera serlo yo también para tí. Pero aquí es donde tropiezo. Y no estás para darme las indicaciones sobre cómo levantarme, y lo acepto así también... siempre me han dicho en clases: la ausencia es también una presencia.
La tuya está en mi hombro derecho, en mi muñeca derecha, en un cuatro de cartulina, en todas partes.

viernes, 10 de octubre de 2008

seis

A la deriva en un barquito de papel que va cayendo por el excusado.
Torbellino de emociones, que fluyen como el vómito... agradable imagen de mi misma manejando camiones aferrada a la tasa del w.c. gritando a los mil demonios por qué no me trae un holograma de ti.

Así podría estar... pero no lo estoy. Miro mi muñeca, y sí, hay momentos en que deseo rebanármela y enviársela a tus padres por correo, pero la contención mental está de mi lado hoy y prefiero seguir con mis dos extremidades intactas, para escribirte estas cuatro letras que creo no leerás... o tal vez sí, ¡qué diablos!

Octavio Paz dijo una vez que la historia es nuestro camino de perfección. Pues bien, al paso que vamos la mejora no se ve inminente, todo lo contrario, se ve lejana, distante y tortuosa, seamos realistas. Tú y yo, never como dicen los gringos, pero somos porfiadas y cuando nos dicen ¡cállate! seguimos gritando e inclusive hacemos aquel bello gesto en el cual las falanges del dedo medio se extienden mientras las otras se recogen.

¿Y qué? ¿A los noventa algún dios kitsch me reprochará haberte amado? Nones. Mi condena está aquí, en el día a día, arrastrando los grilletes del tiempo que se acumulan como el equipaje y la ropa sucia en mi clóset, del cual por cierto salí hace ya un tiempo y la verdad no me noto diferente.

¿Y tú? Tú eres libre. Te libero. Aquí, en estas teclas. Te hago libre AHORA. Vete, quédate, grita, salta, "si eres feliz yo seré feliz" [que del dicho al hecho se vuelve una mentira del porte de un buque pero yo soy teórico-práctica para mis cosas]. Hagamos lo que queramos, pretendamos por ahora, antes de despertar, que somos "libreeeeees!" y gritemos que nos amamos, que nos violamos, que nos callamos, que nos golpeamos, que nos mentimos, que nos mordemos, que nos reímos, que nos lloramos [y vaya que nos hemos llorado], que nos...

Seiseamos.