martes, 29 de noviembre de 2011

Este es el deal

Yo.
Siempre empiezo todas las huevás que digo con yo.
Ayer entre tanta lágrima subterránea pensaba mucho en que no se cómo dejar de mirarme el ombligo. A pesar de que te miro tanto y juego tanto con tu nariz de gato, a pesar de que reparto mi tiempo mejor de lo que corto mis queques húmedos, a pesar de que voy a ver a mi abuela y llamo a mis padres. Soy una fucking egoísta.
¿Cómo hacerles entender, señores del jurado, que yo sólo puedo hablar por mi? ¿Que no hay forma de dejar de mirarme el ombligo si es en mi cuerpo en el que me tocó vivir? Que de buenas intenciones está pavimentado el camino a Lucifer... eso estoy aprendiendo. Espero dejar de aprenderlo pronto.
Soy pura palabra. Me condené a eso hace más de cuatro años, cuando firmé los tres créditos universitarios.
Pero también leer y escribir es acción, es moverse en el tiempo de las páginas, en la linealidad de este cuadrado que he subvertido al hacerles dibujitos con espirales y cohetes y asteroides B612, lugar donde he vivido desde incluso antes de nacer.
Yo solo quiero que todos seamos felices comiendo perdices.
Yo solo quiero hablar de mi sin sentirme una completa idiota al hablarte.
Yo solo quiero la paz mundial y que redactar más de 60 páginas en 8 no sea tan tortuoso.
Yo sólo quiero vivir en una casa de paredes azul violeta verdosas, y tener un perro al cual ponerle Lunes. Ya que alguien es alérgica a los gatos... :3
Yo solo quiero averiguar si sólo se puede escribir con o sin tilde de una vez. Pero ¿importa, importa realmente?
No lo se, yo solo se que:
Yo.

miércoles, 23 de noviembre de 2011

Lo que quieras

Si el invierno te es muy largo, yo puedo acortarlo
Si te gustan los planetas, yo te los llevo a tu puerta...

Si quieres un mundo nuevo, yo ya te lo tengo hecho.

(Si me quieres a mi, siempre estaré bien envuelta y guardada en un secreto)


lunes, 21 de noviembre de 2011

easy like sunday morning

I do got a pocket full of sunshine... solo porque estoy contigo. Es ridículo, siento que podría hacerlo y darlo todo por ti... ¿esto es crecer? Me gusta. Me gusta mucho. Sobre todo porque es contigo.

Easy A contigo es otra cosa. Además que aaaamo esta escena!

jueves, 17 de noviembre de 2011

400

He escrito 400 veces en este blog.

Y aun siento que no digo nada.

jueves, 10 de noviembre de 2011

To live

No tengo idea de lo que me pasa.
Debería estar afuera, comprando flores, depositando cheques, escuchando historias. No se lo he dicho a nadie, pero hace días que no puedo dejar de sentirme como Billy Elliot. Yo debería estar en la calle, bailando, con cámaras en frente que capturasen mi ridículo. Bailar, bailar y bailar, como un trompo irme deshaciendo.
Hace tiempo que quiero hacerlo. Pero no me atrevo.
Tengo tantas canciones que quiero cantar, tantas letras que escribir, tantos lugares a los que viajar, tanta gente que conocer, tantas puertas que abrir y varias otras que cerrar.
Tengo madre y padre, lejos, pero los tengo.
Tengo hermano y hermanas, cerca y lejos, pero los tengo.
Tengo notas borroneadas acerca de un pasado, una bodega que abrir, ese libro que me está comiendo por dentro. Ese libro que no me atrevo a escribir porque una vez que empiece no voy a dejar de llorarlo, lo voy a llorar todo, letra a letra, párrafo a párrafo, y voy a dejar que ese violín en miniatura me corrompa los dedos, me los llene de cursilerías, me los llene de recuerdos amargos, me llene hasta reventar. Me llene de un modo que nada puede hacerlo, me llene hasta los lagrimales, hasta las orejas, hasta la punta de los pies, hasta esa herida que me hice rascándome en el muslo.
Hasta el moretón que me descubrí en la pierna izquierda.
Porque paso en el suelo, desde niña nunca he sabido no caerme. No caigo con gracia tampoco.
Ay, no se qué me sucede, me dijo Maco ayer. Y yo tenía ganas de decirle: Negrita, nadie sabe nunca lo que sucede... está bien no saber, está bien equivocarse, está bien ahogarse, está bien gritar, está bien perderse, está bien extrañar, está bien hablar, está bien callar... está bien.
Pero claro, el cura Gatica predica pero no practica, soy maestra en solucionar vidas ajenas y la mía es un plato de fideos.
Ahora debo terminar de vestirme, tu pijama está tirado sobre la cama, la taza con yogurt se está petrificando en el velador y la canción que escucho dice "it's sixteen miles to the promise land, and I promise you I'm doing the best I can..."
Supongo que eso es vivir, pasar vallas lo mejor que se puede, intentando no tumbarlas todas.
Ahora, a escuchar historias de 1945 y hurguetear en el polvo de una bodega que nunca fue mía.

clumsy

You got me sleeping, tumbling, tripping... and falling on my ass...
And I love it.

sábado, 5 de noviembre de 2011

Sobrecito

El amor es complejo.
Torpe.
Tiene la lengua hecha nudos y los dos pies izquierdos.
Al menos mi amor es así. No puedo - y me cuesta mucho - ver el mundo como lo hacen otros. Y creo que muchas veces pago yo mi mismo pecado, cometido por otras manos.
Da igual, el amor es amor.
El amor se vive, se respira, donde sea que yo esté. Por lo general es mi nudito en la garganta, es mi mirada vidriosa, es mis dedos mordidos, son mis kilos de más o de menos, es mi risa tarada, es mi tartamudeo, son mis Converse una sobre la otra con mis pies dentro sudando. Es el vértigo de perder y ganar, de jugar y apostarlo todo, de saberse en posición desvalida siempre, da igual del lado del que Ud. esté (lo del Ud. se me está pegando de tanto estar en Bogotá), Ud. siempre va a perder.
Y eso es lo que el resto no entiende. Que perder es ganar. Que alejarse es acercarse, que es la oportunidad de ser romántico, de escribir, de mirar paisajes exóticos y suspirar por la amada, de hacer yogas matutinas y comer hasta hartarse, de beber y bailar y recorrer y perderse. De encontrarse a uno mismo para no perder al otro. Es siempre un intento de mantener ese cochino y escurridizo equilibrio. Un equilibrio cabrón hijueputa, dirían aquí.
Da igual cuánto cambie el modo dual de mis tarjetas sims en mi celular, o de si es Tigo o Comcel la empresa que me estafe con tarifas extrafalarias. Mi amor no cambia, ni tampoco mis anhelos, ni tampoco mi búsqueda de paz.
Da igual si desayuno arepas con queso y leche con chocolate y frutas y yogurt con cereal, o si me como un pan tostado con queso y leche sin lactosa, o si me zampo un café furtivo y un trozo de queque, seguiré sintiéndome torpe en el lugar del continente en el que esté. Porque mis brazos no alcanzan a rodearte como tú lo mereces... pero puedo intentarlo.
Puedo seguir moviéndome, viajando, buscando, amándote. Puedo seguir viviendo, para mi y para ti. Y cambiar el modo dual del teléfono esperando el sobrecito que dice "Andrea <3" titilando en mi pantalla.

miércoles, 2 de noviembre de 2011

No, es que tú no sabes.
Tú no tienes la más mínima idea.
Tú nunca has caminado por la cuerda floja.
Ni tienes alas en el estómago.
Tú ni te imaginas lo que me ha dicho, ni cómo me mira, ni cómo se me revuelven los pies en nudos confusos ni se me espesa la saliva ni se me traban las palabras en los oídos ni nada. Tú no tienes la más mínima idea de lo que significa para mi, tú no sabes cuánto la amo, tú no entiendes cómo la extraño...
Tú no sabes lo que es conocerla como la conozco yo, ni sabes cómo la amo.
Y qué bueno, porque entonces soy yo y no tú la que lleva siete meses con ella.

;)

Siete!

So just take my hand, you know that I'll never leave your side.
You're the love of my life, you know that I'll never leave your side.


martes, 1 de noviembre de 2011

My love

I get excited when I think of crawling into your arms.