lunes, 1 de noviembre de 2010

Casi 8

De tanto apostar, alguien siempre pierde.

No he aprendido, ni siquiera con todo lo que viví entonces.
¿Qué dices tú? ¿Perdimos o ganamos?
Yo digo que ganamos. Soy una sucker por ver siempre el vaso medio lleno. Sigo siendo Pepe Grillo, aunque por años dejaste de darme silbidos de ayuda.
Te debo una disculpa, aunque llegue con seis años de retraso.
El miedo, cuando yo era la que dejé de ser, me paralizó como bloques de cemento los pies. Tenía miedo de lo que me dirían todos si me vieran contigo, si supieran lo que yo era, lo que tú supiste ver desde el momento en que pusiste tus ojos sobre mi.
Eras rara. Siempre lo has sido. Yo también lo era. Yo también lo soy. Y sólo tú pudiste ver eso sin reírte, porque todos los demás se rieron. Arica es un lugar duro para ser diferente, tú lo sabes mejor que yo. No necesito predicarle a tu coro.
Sabes que creo que eres a la primera persona a la que me atreví a decirle te amo, claro que lo hice desde la cobardía de que tú nada podrías hacer con ello. Porque tú eras igual de cobarde que yo.
Ese día mis pantalones tenían agujeros, y yo tiritaba a tu lado en el asiento trasero. Last day, first kiss... Special needs y el neumático que resultó no ser el único testigo de algo que se repitió en una sola ocasión. Y que vagamente recuerdo.

Sí, de tanto tira y afloja, de tanto apostar, salimos perdiendo las dos. ¿O ganando las dos? Yo diría que ganando. Aunque mis tiras y aflojas fueron lo menos docto y honesto y en realidad aún me pregunto por qué demonios me hablas. Yo no se si me habría perdonado (es mentira, sí me habría perdonado, habría entendido que éramos sólo niñas asustadas intentando encajar donde simplemente no pertenecemos). Nadando contra la corriente siempre. Con esa proxémica que me dejaba a milímetros de tu nariz aunque medio curso nos mirara. La fleta del curso y la heterocuriosa. Cuando me hacías reír caminando por Diego Portales, cuando íbamos a la escalera al costado del Morro, cuando pasabas a saludar y cuando - por medio de tus habilidades a lo FBI - te seguías enterando de cada paso que daba y que doy.
Perdón por la tardanza, perdón por la demora. Perdón por las palabras, perdón por los silencios. Perdón por las apuestas, las canciones y el tira y afloja.
Seis años tarde, pero vale más tarde que nunca.

1 comentario:

Camila Ignacia Bass dijo...

Quiero decir algo

...al conocerte, al vivir tantas "cursilerias adrenalinicas", al aprender y al disfrutar de un sentimiento tan bkn..podria decir que yo gane.

Te amo Pepe Grillo <3