domingo, 8 de marzo de 2009

heterogenea

Nadar contra la corriente.
Hasta el más ínfimo espermatozoide está condenado a morir si nada en la dirección opuesta a su preciado óvulo.
¿Qué es el oponerse sino el buscar el camino propio? ¿Por qué se dice que se trasgrede cuando en realidad se pavimentan caminos alternativos? ¿Qué es el sentido común sino un puñado de ovejas balando tras el mismo cansado y derrotado pastor?

¿Por qué pensar distinto, sentir distinto, ser distinto es lo que se castiga? No me quiero alejar de la masa. Me empujan fuera de ella.
Basta que sólo una persona gire el rostro en la dirección contraria y familias enteras se desmenuzan. Un sólo pez nadando contra su corriente y debe ser eliminado por exógeno, por no mezclarse, a pesar de ser un pez más.

Si mirar más allá, si tener la mente expandida a horizontes nuevos, si abrir el tercer ojo, si sostenerte entre mis brazos, si dejar el odio de lado, si leer a tal o cual y opinar que sí y que no al mismo tiempo, si no escoger más bandos, si buscar el balance... es ser otro.

Pues, hola.
Soy el otro.

1 comentario:

Rosario dijo...

A mi no me importa que tu seas el otro, porque yo te voy a querer siempre :)

te adori!