jueves, 8 de julio de 2010

No es mucho pedir

Que alguien te haga reír más de lo que te hace llorar.
Que alguien te abrace fuerte sin pedir nada a cambio.
Que respete tus tiempos, lugares y espacios.
Que te quiera tanto como tú le quieres.
Que confíe en ti.
Que se abra.
Que te apañe en tus locuras.
Que te ayude con tus miedos.
Que te apoye cuando nadie más está...
Que te afirme cuando sientas que caes.
Que te diga "Todo va a salir bien..."
Que no se ría de ti sino contigo.
Que te entienda sin necesidad de decirle nada.
Que te vuelva loca.
Que te de besos y te tome la mano.
Que se preocupe por ti.
Que conozca el límite entre no estar ahí y estar demasiado.
Que sea tu confidente, tu hombro para llorar, y que sepa luego cómo hacerte sentir mejor.
Que sea feliz por ti.
Que lo que más le pese es verte triste.
Que nunca te cierre la puerta en las narices.
Que sea lo más abierta al diálogo.
Que imagine y sueñe, y luego lo comparta contigo.
Que crea en ti.
Que no te mienta.
Que no te oculte.
Que esté orgullosa de ti, pero por ser quien eres, no por las "metas" que has logrado...
Que no tema hacer el ridículo si eso significa sacarte una sonrisa.
Que cante contigo canciones inventadas o nuevas.
Que se enganche a tu brazo cuando caminen bajo la lluvia.
Que te prepare un sandwich.
Que te cuide cuando estás enferma.
Que nunca diga "te amo" a no ser que lo sienta de verdad.

Así es como quiero ser... y creo que no es mucho pedir.

No hay comentarios: